sábado, septiembre 20, 2008

lecturas rapidas de la arquitectura y la ciudad

Ciudad al contraluz. Foto SA



Desde hace un tiempo me cansa leer los periódicos. Si mi hermano leyese esto diría que nunca me ha gustado, y quizás tenga razón. Lo cierto es que si antes me molestaba ahora me cansa. Me cansa sobre manera que lo que ayer era noticia hoy ya no lo sea, y no solo eso, sino que además nunca llegues a enterarte de cómo evoluciona o finaliza la cuestión por el simple echo de que YA no es noticia. No importa si se trata de política, economía, dramas familiares o la desaparición del gato del vecino en el periódico local. Uno nunca llega al clou de la cuestión.

Sorprendentemente no son sólamente los medios de comunicación masiva los que nos lo imponen, basta con sentarte a leer tranquilamente el periódico de ayer para que alguien te mire con cara sorprendida y te pregunte “¿qué haces leyendo noticas viejas?”.
Noticias “viejas”, ¿por qué? –me pregunto yo- ¿acaso sabes tu ya cómo ha terminado?. No, claro que no, pero eso no es importante, lo impotante es que YA NO es noticia.
No impota si hoy los periódicos contradicen lo que dijeron ayer, o más extremo aún, que al volver la página te encuentres la misma noticia pero tergiversada…

El problema radica en la superficialidad y velocidad de la información que recivimos, a la par que exigimos un flujo constante de ella, lo que creemos necesario para estar al día. Lo uno lleva a lo otro, es la sardina que se muerde la cola.
Si hay sociedades en las que las clases poderosas mantienen subyugados a sus subordinados mediante la privacidad de información y conocimiento, la nuestra lo logra somentiéndonos a un exceso de ellos, manteniéndolos superficiales, sin darnos tiempo a "mascar" su contenido. Winston Smith se habría tenido que buscar otro trabajo en 1984.

Pero ¿cómo se traduce esto a nuestro día a día? Personalmente creo que el comentario del artista belga Jan Vercruysse también se puede aplicar al pensamiento actual sobre la arquitectura/urbanismo:
"El artista todavía espera al crítico-escritor, y éste ya casi no existe. La crítica es en este sentido una materia de alto nivel prácticamente extinguida porque nuestra sociedad necesita escritores rápidos, periodistas los llamo yo. El ritmo del escritor-crítico es un ritmo lento, y escribir lentamente significa leer lentamente. Eso ya no está al día, y por la tanto desaparece." (1)

Aplicado a la arquitectura y la ciudad podría hablarse de una "arquitectura de lectura rápida" y una "lectura rápida de la ciudad".

Sobre la primera basta con mirar las revistas de arquitectura actuales para comprender el poco tiempo que se dedica a "entenderla". Arquitectura de lectura rápida nos la encontramos facilmente en la mayoría de ellas, o al menos eso nos pretenden hacer creer ya que en muchos proyectos no se musetran ni los planos, por no hablar de una crítica o resencia que pase de las 4 lineas. La imagen pasa a llenar las páginas, imágines impactantes y fáciles de absorver. Sobre este tipo de lectura no me voy a extender mucho ya que Juan ha publicado un muy buen post (buenísimo) que lo sintetizan perfectamente.

Otra tema es la lectura rápida de la ciudad, objetivo que ha ido adquiriendo cada vez más importancia desde la época del Grand Tour (2). ¿Cúantos de nosotros junto con cientos de turistas no ha visitado una ciudad de la mano del Lonelyplanet, Capitol o el ya histórico Baedeker? Ciudades resumidas en museos, monumentos, restaurantes, tiendas y comidas locales se amontonan en la sección de viajes de las librerías.
Guías "indispensables" para "conocer" la ciudad en un fin de semana largo o unas vacaciones cortas, como se le quiera llamar. Costumbre cada vez más extendida que en su visita relámpago se asemeja a las noticias del periódico: vamos una vez y ya sabemos cómo es, o al menos no nos interesa conocerla con mayor profundidad, hay otras noticias, perdón, ciudades, por descubrir. ¿Para qué regresar entonces a conocerla de manera más profunda?. Una visita al centro es suficiente para poderla evaluar. Que la gente actualmente vive en la perifería y la "ciudad" se ha trasladado o desaparecido no parece interesarnos.

Paradójicamente las ciudades son cada vez más complejas en su lectura. Su fraccionamiento y la propaganda turística que de ella se hace, remarcando sólo una parte de lo que és, resulta en una imagen confusa.

Este fraccionamiento se acentúa todavía más por varias razones, que aunque obvias no está de más nombrar:

- Ya no hay un plan total de la ciudad, es prácticamente imposible persarla como un todo, por lo que su imagen o cohexión desaparecen o se desfiguran.

- Sus sistemas de conexión interna son relegados, colapsados o privatizados, al igual que su mantenimiento. Lo que hace que algunos fragmentos y grupos sociales queden aislados o se desarrollen independientemente del resto de la ciudad.

- El bagage cultural de la ciudad crece con ella, diferentes grupos étnicos, religiosos y sociales conviven tremezclándose y entremezclados, buscando o formando consciente-inconscientemente delimitaciones dentro de ella. Esto se refleja en sus calles y funcionamiento, a veces claramente, otras menos, pero sin dejar de estar siempre presente.

- El tamaño de la ciudad aumenta a marchas forzadas por medio de ampliaciones caleidoscópicas en las que su desarrollo está basado entorno a elementos locales a los que "coserla", pretendiendo darle una identidad propia que no siempre está en relación con la "ciudad" original. Quedando así, la ciudad inicial, relegada a lo que hoy en día conocemos como "centro de la ciudad".

- Curiosamente este centro de ciudad, que ya nada tiene que ver con la ciudad actual, es la imagen que se usa para darle una identidad, una marca con la que reconocerla a falta del nombrado plan que la abarque en su totalidad.

Pero no por todo ello se escapa la ciudad de la lectura rápida y simplista a la que también se la somete cuando se intenta moldearla. Pareciera que sus líderes tampoco tienen tiempo de pensar sobre ella... Más aún, ¿sigue existiendo la ciudad como tal?. ¿No ha llegado ya el momento de repensarla y/0 plantearnos que esa idealización que de ella hemos hecho ya no existe?.

Seguimos embarronándola con medios que ya nada tienen que ver con su funcionamiento ni la sociedad acutal mediante planes obsoletos de representación y planeación urbana. Quizás a falta de un nuevo planteamiento sobre una nueva forma de vida en sociedad que, en mi opinión ,ya no se puede seguir llamando ciudad ni limitarse a ella. ¿No es hora de iniciar una nueva lectura?


(1) Het blinkende stof, Anna Tilroe 2004.
(2) Reproducción, fragmentación y colección: Roma y el origen del suvenir. Sarah Benson. Ensayo del libro Arquitectura y turismo. Percepción, representación y lugar. D. Medina Lasansky y Brian McLaren 2006.





7 comentarios:

Federico García Barba dijo...

En cuanto a los periódicos, creo que los medios convencionales van a tener que transformarse o desaparecer. Ya no hay quien aguante la radio o la televisión con su descarada apuesta por moldear nuestras ideas a la conveniencia de determinadas visiones políticas o el interés económico. Eso cuando no están totalmente colonizados por la publicidad, una actividad claramente despreciable que pretende transformarnos en los consumidores que según algunos debieramos ser.
En cuanto a las ciudades y su branding definido a través de mecanismos que señalan el atractivo turístico que debemos visitar, me parece que la actitud razonable es la de la rebelión y tirar a la basura esas supuestas guías que pueblan nuestras estanterías. Deberíamos buscar nuestra propia visión sin intermediarios. Yo lo intento prácticar. Este año he ido a visitar a mi hija a Roma que estaba de Erasmus y he adoptado esa estrategia. Me quedé en su barrio y fue como si descubriera otra ciudad. Mucho más interesante.

Anónimo dijo...

Sobre qué ciudad es la que este individuo está consultando en su plano desplegable, aunque he hecho un esfuerzo y me he pasado un rato, no he logrado sacar una conclusión seria sobre de cuál se trata (algo con un castillo, ¿Granada? ¿Ljubljana?)

Sobre quién es el individuo sí que creo tener más pistas.

¡Enhorabuena por el post! Am

Susana Aparicio dijo...

Hola Federico!
A nosotros nos gusta visitar la periferia de las ciudades a las que vamos y meternos en los sitios donde vemos que van los locales...
Así que en Roma? nosotros estuvimos en Florencia... un museo al aire libre y un Disneilandia de marmol y piedra...

Hola Andrés! jaja... si, el "individuo" es Juan, la ciudad... Zaragoza!(de cuando estuvo con el puente). Supongo que el casitllo al que te refieres será el Pilar o la Aljafería.
Donde queda Ljubljana??? :oI

Anónimo dijo...

Caray, eso sí que es empaparse de "datos existentes" a la hora de abordar un proyecto ;)

Ljubljana es la capital de Eslovenia (viaje que recomiendo encarecidamente, a un tiro de piedra de Venecia).

Abrazos, Am

logan dijo...

ESTO PASA EN EL BARRIO DE LINIERS, CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES, ARGENTINA. ENTERATE. PARTICIPA. OPINA. ENTRA A:
http://liniersasinotequeremos.blogspot.com/

Manu dijo...

Con posts así, no me queda otra que animarte -o al menos desear- que escribas más a menudo.

Felicidades!

jose rafael solana dijo...

¿sigue existiendo la ciudad como tal?. ¿No ha llegado ya el momento de repensarla y/0 plantearnos que esa idealización que de ella hemos hecho ya no existe?.

Es el agotamiento de la mente humana tal como la conocemos. La nueva mente crearia tanto una ciudad real como una lectura verdadera de la ciudad.