DÍA MUNDIAL DEL AGUA 2008
Desde 1993, la ONU celebra el 22 de marzo el Día Mundial del agua. Este año, la fecha se enmarca dentro del Año Internacional del Saneamiento, declarado por Naciones Unidas con la intención de destacar la importancia que tiene el saneamiento básico para mejorar la vida de las personas.
Los datos actuales sobre este servicio confirman que aún queda mucho por hacer:
• Más de 2.600 millones de personas en el mundo carecen de saneamiento adecuado, más del 40% de la población mundial. De ellos, 980 millones de niños y niñas, carecen de acceso a las instalaciones de agua y saneamiento lo que afecta a todos los aspectos de su vida.
• La falta de saneamiento adecuado está asociado a la muerte de casi dos millones de niños y niñas cada año.
• El 88% de las muertes producidas en el mundo por diarreas, segunda causa de mortalidad infantil en el mundo, están relacionadas directamente con un déficit en el abastecimiento de agua y el saneamiento.
• El coste económico que suponen las mejoras en saneamiento es reducido en comparación con los beneficios que conlleva su disponibilidad efectiva. Se calcula que con una inversión anual de unos siete mil millones de euros (menos del 1% de los gastos militares mundiales en 2005) se reduciría a la mitad para 2015 el número de personas que no dispone de sistemas de saneamiento. Por cada euro invertido en saneamiento y abastecimiento, se pueden ahorrar hasta 8 euros en costos de salud y otros servicios básicos.
• La meta 10 del objetivo 7 de los Objetivos de Desarrollo del Milenio establece reducir a la mitad para 2015 la proporción de personas sin acceso a agua potable y a saneamiento básico que existía en 1990, lo cual se relaciona con todos los Objetivos de Desarrollo del Milenio, en especial con los que se refieren a la reducción de la pobreza, la mortalidad infantil, el medio ambiente, la educación y la igualdad de género.
• El incumplimiento de esta meta afecta de manera especial a las mujeres y a las niñas porque la falta de letrinas las obliga a hacer sus necesidades en zonas inseguras, o les impide asistir a la escuela porque no hay instalaciones sanitarias adecuadas, lo cual afecta a su educación, dignidad y autoestima.
Desde la Coordinadora de ONG de Desarrollo – España pedimos al gobierno:
• Que las políticas de cooperación partan del reconocimiento del acceso al agua y al saneamiento como un derecho humano.
• Que favorezca la ayuda oficial al desarrollo a países con recursos insuficientes para garantizar el derecho al agua y al saneamiento.
• Que garantice que la ayuda oficial al desarrollo destinada al acceso al agua y al saneamiento esté dirigida a los sectores sociales más vulnerables asegurando que no se incluyan cláusulas de condicionalidad en la financiación de este sector y que se destine al ámbito público.
• Que, atendiendo a la situación especialmente deficitaria del saneamiento, promueva actuaciones específicas destinadas a ampliar las coberturas de este servicio.
• Que cumpla sus compromisos internacionales relacionados con el acceso a agua y saneamiento, en especial los derivados de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
• Que, en el contexto anterior, los instrumentos que se han comprometido para incrementar la financiación del sector agua y saneamiento, especialmente el relacionado con el Fondo de cooperación para agua y saneamiento para América Latina, se concreten a través de procesos transparentes y participativos.
Desde 1993, la ONU celebra el 22 de marzo el Día Mundial del agua. Este año, la fecha se enmarca dentro del Año Internacional del Saneamiento, declarado por Naciones Unidas con la intención de destacar la importancia que tiene el saneamiento básico para mejorar la vida de las personas.
Los datos actuales sobre este servicio confirman que aún queda mucho por hacer:
• Más de 2.600 millones de personas en el mundo carecen de saneamiento adecuado, más del 40% de la población mundial. De ellos, 980 millones de niños y niñas, carecen de acceso a las instalaciones de agua y saneamiento lo que afecta a todos los aspectos de su vida.
• La falta de saneamiento adecuado está asociado a la muerte de casi dos millones de niños y niñas cada año.
• El 88% de las muertes producidas en el mundo por diarreas, segunda causa de mortalidad infantil en el mundo, están relacionadas directamente con un déficit en el abastecimiento de agua y el saneamiento.
• El coste económico que suponen las mejoras en saneamiento es reducido en comparación con los beneficios que conlleva su disponibilidad efectiva. Se calcula que con una inversión anual de unos siete mil millones de euros (menos del 1% de los gastos militares mundiales en 2005) se reduciría a la mitad para 2015 el número de personas que no dispone de sistemas de saneamiento. Por cada euro invertido en saneamiento y abastecimiento, se pueden ahorrar hasta 8 euros en costos de salud y otros servicios básicos.
• La meta 10 del objetivo 7 de los Objetivos de Desarrollo del Milenio establece reducir a la mitad para 2015 la proporción de personas sin acceso a agua potable y a saneamiento básico que existía en 1990, lo cual se relaciona con todos los Objetivos de Desarrollo del Milenio, en especial con los que se refieren a la reducción de la pobreza, la mortalidad infantil, el medio ambiente, la educación y la igualdad de género.
• El incumplimiento de esta meta afecta de manera especial a las mujeres y a las niñas porque la falta de letrinas las obliga a hacer sus necesidades en zonas inseguras, o les impide asistir a la escuela porque no hay instalaciones sanitarias adecuadas, lo cual afecta a su educación, dignidad y autoestima.
Desde la Coordinadora de ONG de Desarrollo – España pedimos al gobierno:
• Que las políticas de cooperación partan del reconocimiento del acceso al agua y al saneamiento como un derecho humano.
• Que favorezca la ayuda oficial al desarrollo a países con recursos insuficientes para garantizar el derecho al agua y al saneamiento.
• Que garantice que la ayuda oficial al desarrollo destinada al acceso al agua y al saneamiento esté dirigida a los sectores sociales más vulnerables asegurando que no se incluyan cláusulas de condicionalidad en la financiación de este sector y que se destine al ámbito público.
• Que, atendiendo a la situación especialmente deficitaria del saneamiento, promueva actuaciones específicas destinadas a ampliar las coberturas de este servicio.
• Que cumpla sus compromisos internacionales relacionados con el acceso a agua y saneamiento, en especial los derivados de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
• Que, en el contexto anterior, los instrumentos que se han comprometido para incrementar la financiación del sector agua y saneamiento, especialmente el relacionado con el Fondo de cooperación para agua y saneamiento para América Latina, se concreten a través de procesos transparentes y participativos.