miércoles, mayo 25, 2005

Codigo 46



Aunque Kalf se me ha vuelto a adelantar yo también empezaré diciendo que ayer fuimos al cine, a ver la película Codigo 46 (quizás para tu lista Almalé). El guión de la película está basado en el libro de Lieven de Cauter, "La civilización capsular, sobre la ciudad en la era del miedo". Y aunque aún me lo estoy leyendo se puede intuir cuales van a ser los temas tratados por este filósofo cultural. L. de Cauter forma parte del departamente de arquitectura, urbanismo y ordenamiento territorial de la universidad de Leuven (Bélgica), del istituto Berlage de Amsterdam y de la escuela de danza PARTS y de medios de comunicación RITS en Bruselas.

Volviendo a la película tengo que decir que es una de las que más me ha gustado de los últimos tiempos. La música, la fotografía, las tomas de las escenas que te meten en la película como si fueras uno de los personajes... todo esto me dejó entusiasmada al salir de la sala. Como puntos negativos: el final es bastante predecible, hay puntos en los que me gustaría que profundizara más y deja muchas cosas en el aire... aunque esto último no me disgustó. Código 46 no trata de dar respuestas, más bien plantea preguntas y posibilidades.

El argumento nos situa en una ciudad del futuro formada por una sociedad llena de miedos donde el "dentro y fuera" no es sólo un hecho físico sino tambien social: el tener seguro médico o no te deja "dentro o fuera", una especie de peaje determina lo que esta dentro y lo que está fuera, un poder que determina lo que te conviene si estás "dentro" organizándote la vida hasta en la cuestión amorosa o reproductiva y que te deja con todo aquello que le corresponde al ser humano si estas "fuera" -incluyendo los recuerdos. Una sociedad dominada por el miedo: el miedo al sol, a los sentimientos, a los virus que se puedan hayar fuera (los medios de trasporte pasan por una especie de lavacoches al introducirse en la ciudad).

Aunque el planeamiento futurista la hace un poco exagerada no son asi, sin embargo, los dilemas que plantea. El hecho de necesitar un pase para poder entrar a una ciudad es algo que ya existe, lo primero que me trajo a la memoria al ver la escena de entrada a la ciudad fue Ulanbaatar, capital de Mongolia (pinchad aquí para leer un post que escribí al respecto hace un tiempecito); los estados "protectores", y tantas otras cosas que aunque extrapoladas en la película están en el aire y ya comienzan a ser acturalidad.
Una película muy recomendable si uno no espera que le den respuestas.

lunes, mayo 23, 2005

Un container para cada necesidad


Spacebox, Utrecht. Foto: Susana Aparicio

Vagabundos amsterdameses podrán cambiar dentro de poco su banco por una especie de "cobijo-container", decia el Metro.

Si el otro día ponía en un post que en una plaza de Amsterdam se querían "quitar a los vagabundos de encima" hoy leía que el SVE (organización que dirige la experimentación en cuestión de vivienda social) proponía al VROM (Ministerio de transporte, ordenamiento territorial y medio ambiente) que las ciudades dispongan de "cajas de dormir" para los sin techo, es decir, para aquellos que eligen el vivir al margen de la sociedad, no quieren vivir en una casa, prefieren dormir al aire libre y se mantienen alejados de las instancias de ayuda para los sin techo. Según el planólogo J. Singelenber de SVE se trata de unas decenas de personas en cada ciudad y en total se necesitarian unos 2.000 containers para poderles dar acogida nocturna a todos ellos.

No sé dónde se quieren instalar estos containers ni si serán utilizados para alejar a los vabundos del centro de la ciudad, tampoco sé si se tendrán que inscribir en algún lado para poder hacer uso de ellos porque el periódico que leo por las mañanas, el Metro, es bastante malo redactando las nocias (nunca dice ni cómo ni porqué) pero ya el solo hecho de que se planteen el problema y les quieran dar una alternativa a aquellos que de alguna manera "eligen" esa existencia (hay muchos tipos de vagabundos) me parece realmente positivo.

Mientras lo leía me ha hecho recordar la foto que sacamos hará unos meses en Utrecht. En la que inicia este post se puede ver la solución que se le ha dado a la fata de vivienda para estudiantes en esta ciudad. Los containers coloreados están colocados en el campus de la universidad, junto a la biblioteca de Wiel Arets (podeis ver todas las fotos pinchando aqui. Estos container llamdos Spacebox son unidades de 30 metros cuadrados en la que se encuentra una pequeña cocinilla, cuarto de baño y salón dormitorio y están colocadas una sobre y junto a otra, en total forman 3 bloques. En cada uno de estos bloques un container es destinado a ser la "lavandería", en él se encuentran unas 10 lavadoras en las que los alumnos pueden hacer la colada.

Según me han comentado el aislamiento termico está bastante bien, lo único que le falla es el acústico... por lo visto se pueden escuchar hasta los gases del vecino.

Una gran mayoría del parlamento formada por el CDA, PvdA y VVD hicieron saber que aquellos arrendatarios que causen problemas serios en la vivienda y a sus vecinos serán obligados a dejar la vivienda y trasladarse unas "viviendas-container" destinadas a tal fin en las afueras de la ciudad. El SEV -continúa diciendo el mismo periódico- está investigando de cuantas personas se trataría y mira como se soluciona el problema en el extranjero. Este verano se presentara el proyecto al parlamento, aunque aún no se sabe exactamente cómo se le va a dar forma en Amsterdam.

Así finalizaba la noticia que se inició con la solución de lugar para pasar la noche de los vagabundos...

miércoles, mayo 18, 2005

Tolerancia 0



Esto es algo que ayer comentó ya la Pepa y hoy Kalf, pero es una noticia que no se puede dejar pasar.

No se puede negar que Amsterdam ya no es lo que fué. Si antes era conocida como la ciudad donde se podía disfrutar libremente de tu creencia religiosa, origen o preferencia sexual hace ya mucho que dejo dejó de ser así y los primeros que lo notan son los grupos más débiles, ya sea por su posición económica, política, religiosa o simplemente física.

En este momento les ha tocado a los homosexuales: todo comenzó unas semanas antes del Dia de la Reina (el 30 de mayo) cuando un grupo agredió en la calle a un chico por ir de la mano con su pareja. El mismo Dia de la Reina se le dió una paliza al presidente del comité de homosexuales americano, Crane, la noticia salió en todos los medios, fue un choc para la cultura holandesa el que eso pudiese suceder en la que se considera la capital de los gays, la cosa se excusó diciendo que había sido golpeado por un grupo de marroquíes. Este sábado fue golpeado otro homosexual, el periódico comenzaba diciendo que esta vez no habían sido los marroquíes (sean o no los culpables los nombran siempre) sino un amsterdamés, pero eso si (ojo al dato) con unas gotas de sangre sudamericana (palabras del portavoz de la policía, realmente vergonzoso).

Si ya es triste que en este momento se les heche la culpa a los turcos y marroquíes (así en general) de todas las penas del país que tienen que ver con la intolerancia, también es muy triste que cuando no encuentren razón para hechársela a estos busquen otra (y encuentren, que aún es peor) para demostrar que ellos, los holandeses de pura cepa, no pueden ser los intolerantes, tiene que haber alguna explicación de entre medio para que esa persona haya reaccionado así. En este caso la razón eran las gotas de sangre sudamericana que corria por las venas de este bruto.

Lo más triste de todo es que no se den cuenta de que estigmatizando a otras culturas, razas, o grupos lo único que hacen es demostrar su propia intolerancia. "No somos nosotros, son los demás" parece ser su lema últimamente.
Y todo esto pocas semanas después de la celebración del 4 y el 5 de mayo, donde se grita a todo pulmón "no puede volver a pasar" y se pasan una semana entera documentales por la tele donde se muestran los campos de concentración y judios con la estrella de David cosida en la solapa.

Como sigamos así dentro de poco nosotros también nos tendremos que coser una lista en la solapa con el porcentage de proveniencia de nuestra sangre... y ahí me han matado porque, que español no tiene sangre árabe en sus venas? y aquí eso ahora esta muy, pero muy mal visto...

domingo, mayo 15, 2005

¿Cómo es de público el espacio público?


Ayer sábado estuvimos visitando el espacio alternativo de exposiciones 66 East aquí en Amsterdam. En él se tiene la posibilidad de abrir el debate através de una exposición sobre temas concernientes a la ciudad y sus movimientos desde el diseño, la arquitectura, la literatura, el cine, etc.

En la exposición actual Transgressive Architecture saca a relucir un tema muy conocido en todas las ciudades que siempre se deja de lado por afectar a unos habitantes que no son considerados como "parte de la ciudad" aunque estén incondicionalmente unidos a ella.

Los "Límites de la inclusividad" de TA examina las fronteras socio'políticas del espacio público en Londres y más concretamente en Russell Square. "¿Qué pueden ofrecer los arquitectos a las comunidades nómadas callejeras, que generalmente son ignoradas por su estatus de grupo no-cliente?" -se preguntan.

La historia de Russel Square es cada vez más comun en Londres. Esta plaza diseñada por Humprhey Repton a finales del siglo XVII fue creada, como todas las de su area (Bloomsbury), para generar capital y estimular el "little town". Estas placitas y el desarrollo entorno a ellas fueron vistas como "pequeñas comunidades... una manera de crear una ciudad atractiva y humana más allá de las antiguas murallas". Pero en lugar de introducir zonas naturales abiertas en la ciudad su diseño pareció partir de "viejos claustros de monasterios o jardines de conventos medievales con los que Londres estuvo tan familiarizado alguna vez ".

Lejos de ser lugares armoniosos y homogeneos, estas plazas dieron lugar a una fragmentada realidad social siendo muy populares entre los vagabundos y ocupas que se fueron a vivir y trabajar cerca de ellas. Las plazas no habían cambiado mucho desde la segunda guerra mundial, desde entonces y hasta el 2002 Russel Square era utilizada por la noche para el intercambio de sexo y el "outdoor-sex" del mundo gay. Finalmente la plaza acabó siendo cerrada al público por la noche impidiendo no sólo estas actividades sino privándoles también de su alojamiento nocturno a muchos vagabundos.

Los textos y paneles de los proyectos que finalmente han sido desarrollados a partir de estos datos los podreis encontrar dentro de poco en la página de A4 Investigaciones Urbanas.

Mas allá de los proyectos surgidos lo interesante de esta exposición es que pone de manifiesto algo que nos rodea diariamente y a lo que, unánimemente, nos empeñamos en negar e ignorar: esos habitantes nómadas urbanos que llevan el nombre de junkies, vagabundos, "locos del barrio"...
Estas comunidades, si se las puede llamar así, que están íntimamente ligadas a la ciudad sufren constantemente el destierro por no estar consideradas como "usuarios" por derecho de misma.

En uno de los paneles expuestos se comentaba que el diseño del espacio público (así como el de la arquitectura) se realiza basándose en dos premisas "la forma según el uso" o "el uso según la forma". En el primero se parte y se determinan ya de antemano a quién va dirigido ese espacio público (familias, gente joven, tercera edad, etc.) y quien no pertenece a él queda marginado del mismo, pero... ¿cuándo se ha diseñado algo pensando en estos grupos alternativos? y no solo eso, ¿cuándo no se ha diseñado algo excluyéndolos? (quizás un ejemplo de esto último en el que sí que se pensó en ellos es segundo proyecto que nombré en el post cuarto mundo)

Una de las imágenes que más me gustaron fue una serie de planos del parque en los que se mostraban mediante manchas de colores los diferentes usos y actividades que tenían lugar en él a lo largo del día. El dinamismo que emanaba de ellos era fantástico. De ahí me surgió la pregunta del "por qué diseñar espacios públicos tan estáticos siendo su uso tan dinámico".

Curiosamente hace un par de días leía en el periódico que en Amsterdam, en la plaza "Maria Heinneken" el ayuntamiento del distrito al que pertenece (De Pijp) y los tenderos se han propuesto "sanearla" para librarse de las molestias y la inseguridad que llevan consigo los vagabundos que allí se reunen. Como solución han propuesto poner más cámaras de vigilancia en el pasaje comercial, más policías, realizar más actividades en la plaza y remodelarla.

Que la plaza necesitaba una remodelación estaba claro, como ya comenté en otro post, en este momento no es otra cosa que una superficie asfaltada y desolada alrededor de la cual una decena de cafés y restaurantes desbordan de actividad. Y en la que sus principales usuarios son los niños en patines y los borrachos y "locos del barrio" que la usan para reunirse.

Casualmente nosotros vivimos allí cerca y, excepto el caracter desolador que presenta la plaza, nunca hemos constatado esa "inseguridad patente" de la se hablaba en el periódico. En realidad la zona se está haciendo cada vez más popular por su cafés, restaurantes, mercadillo (Albert Cuip) y comercios especializados (una especie de Soho londinense) y estos visitantes indeseados no corresponden con la imagen que se quiere dar.

Así que una vez más son desterrados sin que se les proponga ningun espacio alternativo donde poder reunirse, la historia se repite...

sábado, mayo 14, 2005

El tiempo me acompaña


Incontinencia del tiempo, José R. Luna de la Ossa.

Hacía mucho que no lo llevaba conmigo, años habrán pasado hasta la fecha, pero hoy me he decidido y lo he ido a buscar. Y allí está, colgado de mi muñeca derecha como si nunca se hubiese marchado: el tiempo a vuelto a mi lado.

Siempre se me ha hecho rara la idea de llevar el tiempo encerrado en una cajita, marcando su paso como diciendo "ves, esos minutos que estan pasando ya no volverán, así que aprovéchalos bien". Me parece fascinante que ese diminuto objeto lleve dentro algo tan maravilloso como es esa linea curva, esa cuarta dimensión, sin que nos permita manipularla, tan sólo nos la muestra, la hace patente.

A veces me imagino que dándole marcha atrás a las agujas esos preciados minutos vuelven a mi mundo y los puedo volver a revivir... pero no, la maldita máquina no se deja manejar, no cede ni un segundo.

Quizás que por eso decidí, hace ya mucho tiempo, dejarla de lado. No quería que me machacase su paso constantemente, quería liberarme de él. Pero hace unos meses me dí cuenta de que había estado viviendo en una ilusión, nunca había dejado de acompañarme: primero me lo dijo en susurros, se metió en mi teléfono y no fuí consciente hasta mucho después de que, con cada llamada, me mostraba la hora; más tarde fueron las campanadas del Rijksmuseum que me llamaban cantando, diciéndome entre risas que él seguía pasando por mi casa; para dejarme ver finalmente (hasta entonces había tenido como una venda tapándome los ojos) que nunca me había abandonado, todo ese tiempo me había estado acompañando desde la esquinita derecha del ordenador.

Así que hoy me he decidido a capturarlo, desde ahora voy a ser yo la que le obligue a venir conmigo, a que me acompañe y remarque cada uno de los momentos que se suceden para que, cuando los quiera rememorar, me vuelvan a la memoria con solo mover sus agujas poniéndolas en la hora indicada.

Desde ahora voy a ser dueña y señora de mi propio tiempo.

lunes, mayo 09, 2005

Entre Alicante y Zaandam: un bastonazo.


Paseo Marítimo, Alicante. Foto: Susana Aparicio

Hace un tiempo nombré en un post algo que siempre me ha llamado la atención en Holanda, a pesar de conocer en parte las causas, y es la falta de gente mayor por la calle.

Por una parte es cierto que el tiempo, en este país de lluvias constantes, no es el más indicado para salir a dar un paseito a según que edades, si además tenemos en cuenta que las personas mayores a partir de los 60 años ya suelen vivir en residencias de ancianos (pocas de ellas cercanas a los centros urbanos) y que los que pueden se van a pasar el resto de sus días a paises más cálidos no podría resultar realmente extraña esta falta de "abueletes callejeros" que suelen poblar las calles españolas y sobre todo las plazas y parques soleados.

En esto pensaba yo denuevo mientras caminaba por el paseo marítimo de Alicante hará un par de semanas y veía con sorpresa como la tercera edad alicantina, y parte extranjera, se adueñaba del mismo por las mañanas para pasar a la tarde a las heladerías y cafeterías colindantes. Para facilitarles tan ardua tarea el ayuntamiento había colocado unas simples sillas plegables de madera que eran gratamente utilizadas por grupos de personas mayores que se reunían a charrar, solitarios que leían el periódico o algun libro al sol-y-sombra de las palmeras, otros escuchaban la radio y, muchos de ellos, se entretenían viendo pasar a los transeuntes. Esta escena me trajo a la memoria una mañana de invierno en la que paseando por el parque Güell, en Barcelona, me quedé impresionada por el ajetreo de personas mayores que se movían por él siguiendo los senderos más soleados. Algunos, como en Alicante, caminaban en grupos de dos o tres "arreglando el mundo"; otros, los más solitarios, iban acompañados sólamente por su radio.

Hace unos días, leyendo el periódico de camino al trabajo, me encontraba con una noticia que decía que en Zaandam (pequeña ciudad al noroeste de Amsterdam) habían expulsado a un grupo de abuelos que se reunían regularmente en un centro comercial por considerarlos molestos, bajo pena de ponerles una multa de 60 euros si volvían a reunirse ahí. Los tenderos habían comentado su contento con esta decisión del ayuntamiento, lo que no me quedo claro es porqué les resultaban tan molestos.

Realmente me quedé pasmada, si se reunían allí significa que no tenían otro lugar dónde hacerlo: en los cafés te cobran consumición, en la calle llueve y hace frío, esta claro que, como a todo el mundo, también les gusta encontrarse con gente de su edad fuera de casa. Parece mentira que en esta sociedad donde la tercera edad impera se los tenga tán poco en cuenta pero que encima se los amenace con una multa de 60 euros por reunirse en lo que se supone que es una zona pública... a mi me quedó la intriga de qué estarían haciendo los abueletes para que los hecharan de esa manera??

viernes, mayo 06, 2005

Volume



Hoy ha sido la presentación de la revista Volume en la libreria Atheneaum en Amsterdam. Volume es la precesora de la revista Archis, esta dejo de existir después de que el ministerio de cultura holandés le quitase el subsidio por considerar que "no aportaba a difundir la arquitectura holandesa".

Curiosamente Archis era la única revista holandesa en la que se podía encontrar una buena crítica a la arquitectura y urbanismo tanto holandés como extranjero (y quizás un poco más extranjero que holandés). Si bien es verdad que no era la típica revista que muestra fotos de proyectos arquitectónicos con sus fachadas e interiores, Archis era una de mis revistas faboritas porque desarrollaba temas que otras revistas, tanto holandesas como extranjeras, no tocaban. No solamente era una crítica al diseño desarrollado, también mostraba las realidades económicas , sociales y politicas que habían llevado a realizar los proyectos. Desarrollos urbanos en China, Mexico o paises del Este de Europa entre otros eran seguidos y analizados, temáticas entorno a las ciudades eran también habituales en ella.

Desgraciadamente hace unos meses recibía la noticia de que la revista iba a desaparecer, fuimos a la conferencia que dieron en el NAI (instituto holandés de arquitectura) y para nuestra sorpresa más allá de comunicar la defunción de Archis anunciaban la creación de una nueva revista conjuntamente con AMO y la universidad de Columbia. Esta revista se llamaría VOLUME.

Como decía al inicio del post hoy, a las 17:00, ha sido la presentación de la susodicha revista en el centro de Amsterdam. Hay que reconocer que Amsterdam es un pueblo hasta para estas cosas: a la presentación han asistido Rem Koolhaas, Ole Bauman (redactor de Archis y Volume), Arjan Oosterman (coredactor de las mismas) y varias personas más. Como la librería en si es muy pequeña lo han celebrado en la placita en la que se encuentra encendiendo un cohete que en lugar de salir volando (todos estábamos mirando ya al cielo esperando verlo salir) se ha apagado con un siseo y ha dejado paso a una lluvia de papelitos de colores que tiraban con un cañón desde la ventana del primer piso de la librería (que además se les ha atascado). Afortunadamente nosotros habíamos llegado poco antes de las cinco, cuando todavía no había nadie, y la hemos podido comprar sin problemas. El primer volumen muestra una serie de textos de presentación acompañado de una revista de 80 páginas sobre la unión de Europa con la gráfica típica de los libros de Rem Koolhaas y que ha sacado mucho material de su último libro Content.

Bueno, aquí os dejo el link de la página de VOLUME (Archis) para el que le quiera hechar una ojeada (aunque de momento no haya mucho para ver).

martes, mayo 03, 2005

La ventanilla derecha


Mezquita en Zuid-Oost, Amsterdam. Foto: Susana Aparicio

Una de las cosas buenas de cambiar de trabajo es que cada día descubres trozos nuevos de la ciudad al ir de camino a la oficina. Al principio me sentaba junto a la ventanilla izquierda del metro, curiosamente ya conocía ese lado de la ciudad por lo que el recorrido era más de reconocimiento urbano que de expedición. La sorpresa me la llevé el día que me sente junto a la ventanilla derecha... justo una parada antes de llegar a mi destino se apareció ante mis ojos una mezquita, con minaretes incluidos, pegada a las vias del metro.

La mezquita en si no tiene nada de sorprendente, lo que la hace tan extraña es su ubicación: pegada a la parada de metro "Kraaiennest" (nido de cuervos); en el Bijlmer, zona habitada casi exclusivamente por africanos (ya se, gran parte de estos paises son musulmanes, pero igual no es la primera asociación que hace una); una edificación totalmente nueva (aún no está en uso) en medio de bloques de edificios prácticamente en ruinas (os estareis preguntando: pero donde se ha ido a trabajar esta chica? jajaja) entre los que se está introduciendo una infraestructura totalmente nueva para permitir el derribo de estos bloques y la construcción de viviendas destinadas a familias de clase media-alta.

Realmente es una visión que, de tan estrafalaria, me alegra las mañanas transportándome a esos lugares donde lo inesperado todavía es posible. Algo que ya había calificado de utopía aqui en Holanda...

domingo, mayo 01, 2005

Konninginnedag


Brouwersgracht, Amsterdam. Foto: Susana Aparicio

Ayer fue Konninginnedag (el día de la reina), este día se celebra su cumpleaños en todo Holanda. En realidad ella cumple años en octubre pero como ese mes es bastante malo para poder festejarlo bien en la calle la actual reina (Beatriz) mantuvo la fecha en la que su madre los cumplía para que la posibilidad de que no llueva sea mayor... y casualmente casi todos los años el 30 de abril hace buen tiempo.

Ayer, además, se conmemoraba que justo 25 años antes la misma reina subía al trono neerlandés por lo que hubo conciertos en toda la ciudad. Las plazas y calles más importantes tenían un escenario montado donde cantantes locales y nacionales entretenían al público. Amsterdam recibió 400.000 turistas que junto con sus habitantes se pasearon por las calles y canales de la ciudad. El naranja, color de la casa real, predominaba en toda la ciudad y la música nos acompañaba a todas partes.

Otra característica de este día es que todo el mundo puede poner a la venta lo que se le ocurra, generalmente lo que tienen guardado en el cuarto trastero, y así hacerse con un dinerito. Un día antes del cumple de Bea las aceras se ven marcadas con pintura que indica que ese pedacito (unos tres o cuatro metros cuadrados) estan reservados para la venta, hay quien se queda a dormir la noche anterior en el lugar donde va a poner su puesto, con saco de dormir y té caliente, para que no le quiten la plaza. A la mañana siguiente la ciudad entera se ha transformado en un mercado de pulgas donde se pueden encontrar desde verdaderas antigüedades hasta verdadera basura.

Una de las zonas más bonitas, para mi, en este día es el Vondelpark. Este parque queda reservado para los niños: son ellos los que venden sus juguetitos, ropa vieja, galletas hechas por ellos mismos (normalmente deformes y pegajosas), los que tocan instrumentos y hacen malabares a cambio de unas moneditas (en un ratito subiré las fotos a Opnames para que lo podais ver). La zona del Jordaan y los canales son tambien preciosas para visitar, eso si, como el resto de la ciudad estan totalmente abarrotadas de gente paseando por ellas, comprando, regateando, comiendo, bebiendo o bailando.

Un día altamente recomendable para visitar la ciudad, aunque no para llegar a ella como turista despistado porque el transporte publico en el centro no funciona. Ayer tuvimos que salvar a una pareja que andaba en medio del gentío con sus maletas sin saber cómo llegar al hotel o donde se encontraban.

Y desde aquí, aunque con un día de retraso, no me queda más que felicitar a la reina: Felicidades Majestad!