Kwakoe 2006. Foto: SA
Amsterdam multicultural, o al menos así le gusta llamarse a la ciudad de los canales.
Que en ella (con)viven diferentes culturas se ve claramente en sus calles, que hay un problema de integración entre ellas se vió igual de claramente los últimos años durante el "reinado" de la ministra de extranjería e integración Verdonk, quien no se ha cansado de hablar de la necesidad de integración que hay en este país por parte de los inmigrantes.
Más allá de la problemática entorno a este tema de si es así o no y cómo ha surgido, nos podría ocupar el cómo solucionarlo a nivel urbano. ¿Cuánto no se oye hablar hoy en día de la globalización a nivel cultural, arquitectónico y urbano como si todo fuese uno mismo?, ¿pero lo es?. ¿Se ven en las ciudades, a nivel espacial urbano, las diferentes culturas que las habitan?, ¿y se tiene encuenta en las viviendas el uso cultural de sus posibles habitantes? la respuesta es simple: NO.
Habrá quien diga que eso no es posible definirlo con antelación. Yo creo que en una cultura como la holandesa en la que en cualquier masterplan ya se decide el porcentage de gente mayor, gente joven y familias a quien está destinada la nueva zona a edificar, facilmente se podría planear tambien para qué cultura se construye cada vivienda o bloque de viviendas. Más aún si se tiene en cuenta que en una ciudad como Amsterdam cada zona está fuertemente diferenciada culturalmente.
Una de estas zonas es el Bijlmer (nombre del barrio) o Zuid-Oost (nombre de la zona o distrito), que no solo está aislado geográficamente -se encuentra separado de Amsterdam por el pueblecito de Duivendrecht- y urbanísticamente sino también culturálmente. El Bijlmer fue creado en los años 60 como respuesta a la falta de espacio en las viviendas del Jordan (barrio obrero por aquel entonces) pero la inminente independencia de Suriname hizo que muchos holandeses antillanos emigraran a Holanda creando un problema de vivienda. La solución fué instalarlos en estos edificios lecorbusianos rodeados de jardines que poco tenían que ver con su cultura y creando un gueto del barrio que tanto parecía prometer (en otro post contaré la historia tan especial de este barrio). Finalmente acabó siendo el barrio de mayor delincuencia de Amsterdam donde el porcentaje mayor de habitantes es africano y latino.
Pero volviendo a los gritos en favor a la integración de Verdonk, es curioso que no aproveche las demostraciones culturales para fomentarla. Este es el caso del Kwakoe, un festival que se realiza cada año en el Bijlmer durante los fines de semana de julio y agosto. Extrañamente no se ven por la ciudad casi anuncios de esta iniciativa, que ya lleva 31 años desarrollándose, no se indica cómo llegar hasta el terreno donde se realiza ni debe de haber muchos subsidios para traer grupos musicales de diferentes paises africanos y latino-americanos. Con esto se conseguiría darle un caracter más internacional y cosmopolita a la zona atrayendo de esta manera a un público más variado, ayudando igualmente a sacarle esa fama de peligroso que ha ido cosechando a lo largo de los años y abriendo los ojos holandeses a otras representaciones culturales de la que tan rica es su capital. Pero no, parece ser que la integración solo es por parte de los inmigrantes y sólo consiste en seguir un curso de aprendizaje de idioma de costumbres holandesas (por ejemplo: ¿qué hay que llevar a un cumpleaños? flores)
Consecuencia: el Kwakoe es una festividad de caracter local en la que una sola carpa muestra las actividades culturales del barrio (bailes) y en un podium compiten los grupos musicales con la música a todo volumen de los tenderetes de comidas y bares que llenan la mayor parte del terreno.
Eso si, por un momento nos sentimos devueltos a Africa, envueltos en sus olores, sabores y sonidos.
Que en ella (con)viven diferentes culturas se ve claramente en sus calles, que hay un problema de integración entre ellas se vió igual de claramente los últimos años durante el "reinado" de la ministra de extranjería e integración Verdonk, quien no se ha cansado de hablar de la necesidad de integración que hay en este país por parte de los inmigrantes.
Más allá de la problemática entorno a este tema de si es así o no y cómo ha surgido, nos podría ocupar el cómo solucionarlo a nivel urbano. ¿Cuánto no se oye hablar hoy en día de la globalización a nivel cultural, arquitectónico y urbano como si todo fuese uno mismo?, ¿pero lo es?. ¿Se ven en las ciudades, a nivel espacial urbano, las diferentes culturas que las habitan?, ¿y se tiene encuenta en las viviendas el uso cultural de sus posibles habitantes? la respuesta es simple: NO.
Habrá quien diga que eso no es posible definirlo con antelación. Yo creo que en una cultura como la holandesa en la que en cualquier masterplan ya se decide el porcentage de gente mayor, gente joven y familias a quien está destinada la nueva zona a edificar, facilmente se podría planear tambien para qué cultura se construye cada vivienda o bloque de viviendas. Más aún si se tiene en cuenta que en una ciudad como Amsterdam cada zona está fuertemente diferenciada culturalmente.
Una de estas zonas es el Bijlmer (nombre del barrio) o Zuid-Oost (nombre de la zona o distrito), que no solo está aislado geográficamente -se encuentra separado de Amsterdam por el pueblecito de Duivendrecht- y urbanísticamente sino también culturálmente. El Bijlmer fue creado en los años 60 como respuesta a la falta de espacio en las viviendas del Jordan (barrio obrero por aquel entonces) pero la inminente independencia de Suriname hizo que muchos holandeses antillanos emigraran a Holanda creando un problema de vivienda. La solución fué instalarlos en estos edificios lecorbusianos rodeados de jardines que poco tenían que ver con su cultura y creando un gueto del barrio que tanto parecía prometer (en otro post contaré la historia tan especial de este barrio). Finalmente acabó siendo el barrio de mayor delincuencia de Amsterdam donde el porcentaje mayor de habitantes es africano y latino.
Pero volviendo a los gritos en favor a la integración de Verdonk, es curioso que no aproveche las demostraciones culturales para fomentarla. Este es el caso del Kwakoe, un festival que se realiza cada año en el Bijlmer durante los fines de semana de julio y agosto. Extrañamente no se ven por la ciudad casi anuncios de esta iniciativa, que ya lleva 31 años desarrollándose, no se indica cómo llegar hasta el terreno donde se realiza ni debe de haber muchos subsidios para traer grupos musicales de diferentes paises africanos y latino-americanos. Con esto se conseguiría darle un caracter más internacional y cosmopolita a la zona atrayendo de esta manera a un público más variado, ayudando igualmente a sacarle esa fama de peligroso que ha ido cosechando a lo largo de los años y abriendo los ojos holandeses a otras representaciones culturales de la que tan rica es su capital. Pero no, parece ser que la integración solo es por parte de los inmigrantes y sólo consiste en seguir un curso de aprendizaje de idioma de costumbres holandesas (por ejemplo: ¿qué hay que llevar a un cumpleaños? flores)
Consecuencia: el Kwakoe es una festividad de caracter local en la que una sola carpa muestra las actividades culturales del barrio (bailes) y en un podium compiten los grupos musicales con la música a todo volumen de los tenderetes de comidas y bares que llenan la mayor parte del terreno.
Eso si, por un momento nos sentimos devueltos a Africa, envueltos en sus olores, sabores y sonidos.
Kwakoe 2006. Fotos: SA
2 comentarios:
Un saludo desde Huesca. Susana.
Buen blog, y buenas fotos, en especial, las de la nevada, que parecen sacadas de un cuento de Navidad.
Hola cambridge! que gusto recibir saludos desde huesqueta!
Otro para ti y espero seguir los sanlorenzos a través de tu blog!
En todo caso que los disfrutes! yo me los voy a perder un año más... :o(
Publicar un comentario